En el año 1992, los Señores Andrés Altamirano Rojas y Juan Carlos Alvarado; decidieron asociarse con la intención de llevar a cabo un importante desafío, crear su propia empresa, la que se llamo Comercial B y M Ltda. El giro comercial de la empresa era la Venta de Repuestos, Servicios e Insumos para la minería en la III Región de Atacama.
A raíz de la inestabilidad política, social y económica por la que atravesaba nuestro país en esa época, los socios fundadores decidieron poner término a fines de Julio de 1993 a la Sociedad Comercial B y M Ltda., debido a que los objetivos planteados en un principio difirieron con respecto a los obtenidos.
El señor Andrés Altamirano, teniendo la experiencia de haberse desempeñado en el área de la Venta de Repuestos Caterpillar, Ingersoll Rand y otras marcas, en C.V.C. por alrededor de 8 años en distintas ciudades a lo largo del país, siempre consiente que un oportuno y excelente servicio es la clave del éxito, además del apoyo incondicional por parte de su señora Berenice Bastias Berrios, decide crear su propia empresa en la ciudad de Copiapó, a la cual llamo “Comercial San Ignacio”. En un principio la empresa estaba formada por don Andrés Altamirano y una Secretaria, y se ubicaba en calle los Carreras esquina Salas.